Carlitos habló de su regreso a la Selección. Afirma que está dispuesto a jugar en el puesto “que me digan”. Desmintió, otra vez, una supuesta enemistad con Messi a quien calificó como “el mejor de todos”. Y sostiene que el torneo continental es el gran objetivo del grupo.
Qué tiene para ser el jugador del pueblo? ¿Por qué acapara tanta idolatría? ¿Por qué no puede caminar por la calle como cualquier fulano? ¿Qué tiene que lo hace diferente al resto? En primer lugar, Carlos Tevez, Carlitos , es carismático . Pero, fundamentalmente, es genuino . Se muestra, esté donde esté, tal cual es. Es el mismo en Londres, en Fuerte Apache, filmando un spot publicitario por las calles de Buenos Aires o en una cancha de fútbol. Puede sentarse en el living de Susana Giménez como si nada, como si fuese de ese palo de toda la vida, como ir a una bailanta y subirse al escenario para cantar con su hermano y sus amigos. No cambia. La esencia de Carlitos no se altera.
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