“Abracemos la cruz de Jesús con un corazón sincero”
En la Catedral de Corrientes se llevaron adelante los actos religiosos centrales del Viernes Santo encabezados por el Arzobispo de Corrientes. “Estamos ante un crucificado que nos llena de paz y nos trae la gran esperanza” señaló el prelado.
La tarde del Viernes Santo presenta el drama inmenso de la muerte de Cristo en el Calvario; la cruz erguida sobre el mundo sigue en pie como signo de salvación y de esperanza. En ese marco se concretó en la Catedral de Corrientes la ceremonia de la Pasión y Muerte de Jesús.
El Arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik presidió la ceremonia y señaló tras la lectura y el relato del Evangelio según San Juan que “los hechos que se acaban de relatar hablan por sí mismos, hubo testigos que acreditan esos sucesos y ponen fuera de toda discusión la realidad histórica de la pasión y muerte de Jesús”.
En la continuidad de su mensaje, el Arzobispo indicó “estamos ante un crucificado que nos llena de paz y nos trae la gran esperanza, quien entregó su propia vida por amor a los hombres”. Y en un paralelismo con nuestra religiosidad indicó “ese acontecimiento le imprime verdaderos significado a nuestra Cruz de los Milagros por ello ese madero histórico se convierte en signo fundacional del pueblo correntino” expresó Stanovnik.
“La iglesia no es un invento de los hombres no la construimos con nuestro ingenio, nace del costado abierto del salvador, nace del amor de Dios y de la cruz de Jesús” continuó
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