Predio de Sadoyeav

Más de 100 familias se ganan la vida entre 300 toneladas de desperdicios

Viven en cercanías del basural municipal, muchas de ellas hace mas de 20 años están allí. El predio colapsado espera veredicto oficial.

El basural a cielo abierto esconde entre sus montañas de residuos a cientos de personas que todos los días llegan hasta allí dispuestas a todo. Conviven sin ningún tipo de protección con las bolsas de basura que caen de los camiones. Su vida es dura como la de pocos, verlos remover las toneladas de desperdicios estremece y quienes trabajan en el predio aseguran que si bien intentan que no ingresen, se torna imposible.

En un informe publicado días atrás, este medio dio cuenta de la situación crítica del predio que tiene sus horas contadas y según aseguran los especialistas sólo hay espacio para tirar basura por seis meses más en el viejo basural y en caso de emergencia el Instituto del Agua y el Ambiente ya habilitó una nueva fosa que podría extender ese tiempo a unos seis meses más.

En medio de las montañas de basura estaban ellos, un puñado de personas que lejos de las comodidades caminaban con la cabeza gacha, entre los desechos en putrefacción en busca de algo que les pueda ser de utilidad. Quienes trabajan allí dicen que las personas ingresan de forma ilegal al lugar todos los días y que si bien en varias oportunidades intentaron sacarlas de allí no lograron hacerlo. “Ellos viven de esto, les hablamos muchas veces, pero no logramos conciliar”, aseguraron desde la empresa.

Las imágenes impactan al igual que el olor nauseabundo de un sitio que recibe 300 toneladas de basura todos los días. Allí conviven quienes en máquinas hacen la tarea de ubicar y apisonar las cientos de bolsas que ingresan con la llegada de cada camión, con quienes tratan de encontrar algo que llevarse a sus casas o bien algunos elementos que puedan revender en el mercado negro de chatarra. Son clasificadores según ellos mismos cuentan, recorren el lugar en ojotas desde las 8 de la mañana y van colocando en sus bolsas de nylon todo lo que entienden les puede servir. Cartón, botellas, papeles, comida y hasta electrodomésticos en desuso son parte de lo que descarga cada camión que ingresa.