LA INFLACION OFICIAL EN ABRIL LLEGO A 1,8 Y SUMO 11,9 EN EL PRIMER CUATRIMESTRE

Familias agudizan el ingenio para achicar gastos por la suba en precios de alimentos

CAMINAR. Es la opción para buscar precios tanto en los barrios como en supermercados; las familias de clase media sólo compran lo que necesitan. 

Grupos familiares compuestos por seis personas sostienen que pueden gastar hasta 150 pesos en el almuerzo. Los consultados comentaron que en los supermercados hay más oferta pero en los barrios hay productos más baratos. 

Los precios elevados tanto en alimentos como en servicios obligaron a los argentinos a achicar gastos. En una consulta de El Litoral a algunas familias correntinas, la mayoría  comentó que buscan precios y que eliminaron de sus vidas las salidas al cine o un asado el domingo. 

En este contexto hay que recordar que según el último informe que dio a conocer el ministro de Economía de la Nación, Axel Kicillof, la inflación fue del 1,8 por ciento en abril; en Argentina ya acumula un 11,9 por ciento sólo en el primer cuatrimestre, frente al 10,5 por ciento que preveía para 2014 el Presupuesto. Sin duda esto se ve reflejado en los hogares, donde la gente tuvo que modificar tanto el consumo de comestibles como el uso de servicios. 

“Obviamente la economía afecta a nuestro bolsillo, ahora caminamos más buscando precios, antes comíamos más carne roja y ahora más pollo, menos pan y más comida casera. Por el precio de la garrafa en el barrio ahora hacemos fila para conseguirla”, dijo Darío, padre de dos niñas, a El Litoral. 

Delmina, de 70 años, también contó que consumen más pollo por el precio de este alimento y que antes podían pagar un remis pero ahora optan por el transporte público. “Soy jubilada y vivo con mi nieto que es changarín, no nos alcanza la plata, dejamos de comer carne de vaca y de tomar leche porque sale muy caro”, contó. 

Al igual que la mujer mayor, Marcelo y Mariana también llegaron al centro a buscar precios en una carnicería. Comentaron que “en el barrio cuesta menos pero no es de buena calidad” y que pueden gastar hasta 400 pesos en carne roja para consumir durante toda la semana. Tienen sólo un hijo de 15 años. 

“Nos dedicamos más a la búsqueda de precios, a comer más pollo. Tenemos niños y no podemos dejar de consumir alimentos de calidad. Antes llenábamos el changuito del supermercado y ahora salimos con tres o cuatro bolsas”, contó Laura de 30 años. 

Cristian y Marta, que tienen dos hijos, comentaron que “no alcanza ni para ahorrar, en vez de salir a flote nos hundimos más con esta economía”. “Un paquete de pañales de marca, de 25 unidades, cuesta 80 pesos y no podés bajar la calidad porque los otros sacan alergias y al final terminás gastando más en cremas; gastamos en comida, sin contar el yogur y la leche de los chicos, entre 100 y 200 pesos por día”, dijo el padre de familia. 

“Buscamos más precios, vivo con mis cuatro hijos, mi esposo y con mi nieto que es bebé. Gastamos más de 120 pesos para hacer un guiso, entre la carne y el pan, la leche para el bebé me la da mi mamá que recibe por el Pami”, contó Carmen del barrio Juan XXIII.