Qué ponen en juego Bianchi y Ramón Díaz en el clásico entre Boca y River
Con objetivos y
necesidades diferentes en el Torneo Final, ambos equipos necesitan una
victoria. El "Xeneize" para volver al triunfo y salir del fondo de la
tabla de posiciones, el "Millonario" para mantenerse en la lucha por el
campeonato.
(Infobae) En la edición 200
(entre amateurismo y profesionalismo) del partido más importante del
fútbol argentino, Boca y River volverán a enfrentar en La Bombonera,
ambos con la misión de conseguir un triunfo.
La
victoria puede servir a los dos como una salvación si no logran cumplir
ninguno de los objetivos trazados para el semestre, donde disputan el
Torneo Final, la Copa Argentina, y, el Xeneize, la Copa Libertadores.
Un
triunfo en el Superclásico puede hacer olvidar un mal presente, ganarle
al rival de toda la vida, sin importar que sea un partido solo, es un
logro que se festeja como cualquier otro.
Boca
acumula 10 fechas sin triunfos en el certamen local y ocupa la posición
18 de la tabla de posiciones. Sin riesgo de caer a la última colocación
(Argentinos Juniors tiene dos unidades menos y un partido más), el
elenco que dirige Carlos Bianchi necesita empezar a sumar de a tres para
mejorar su presente.
Su única victoria en el
Torneo Final fue ante Quilmes en la primera fecha. Luego de estar en
desventaja por 2 a 0, se impuso por 3 a 2 como local, pero desde allí no
volvió a ganar, empató seis encuentros y perdió cuatro.
Un
triunfo le daría el envión anímico necesario para afrontar lo que queda
del certamen y terminar de la mejor manera la competencia. Además, le
permitiría seguir afianzando el juego luego del éxito en el primer
partido de los octavos de final de la Libertadores ante Corinthians y
llegar con confianza a la vuelta.
Pero una derrota
complicaría los planes, y que sea ante River sería un agravante. Ganar
el Superclásico es uno de los objetivos que se fijan antes del comienzo
de la temporada. En Boca, además, podría repercutir en el ánimo del
plantel y superar la peor racha sin triunfos de la historia.
El
"Millonario" llega a la cancha de Boca con las mismas obligaciones y
presiones. Si quieren convertirse en un firma candidato a pelear por el
título del Torneo Final, debe ganar para no perderle pisada a los
líderes.
Perder, en cambio, sería un problema para
un equipo que no encuentra su identidad y lleva mucho años sin luchar
un campeonato de Primera División. Para olvidar el paso por el Nacional
B, un triunfo en La Bombonera sería una ayuda importante.
El
“Millonario” llega con más certezas en su juego que el “Xeneize”, si
bien falto de un patrón encontró en algunas individualidades y
resultados un poco de tranquilidad. Los dos cuenta en sus bancos de
suplentes con entrenadores importantes en la historia del club, pero
hasta el momento no pudiera revalidar su pergaminos y una victoria hoy
los ayudaría.
El empate no parece, a priori, como
una solución para ninguna de los dos. Boca seguiría sin ganar y River
quedaría a más de un partido de la cima del campeonato. Pero según las
circunstancias puede ser un alivio no caer.
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