LA PROTESTA DE LOS GREMIOS ANTI K
Moyano le pidió a la Presidenta que se "ocupe de la inflación y la inseguridad"
En el arranque de su discurso, Moyano realizó un "desagravio a los jubilados". "Hacemos un llamado a la Presidenta de la Nación, que se ponga la mano en el corazón y que piense en estos viejos que necesitan el dinero que se les debe", enfatizó Moyano. Fue el primer paso. Luego, el camionero cambió de frente y calificó como "un robo y un impuesto perverso y maldito" el pago de ganancias en los salarios.
"Es un robo que se le hace a los trabajadores, compañeros; es lisa y llanamente un robo ese impuesto perverso y el gobierno se hace el distraído o está distraída". Y pidió "revisar" esa medida para subir el piso del mínimo imponible en las escalas salariales. "Es necesario que tengan en cuenta el reclamo de los trabajadores, porque esta es la forma de actuar en democracia", aseguró.
Y arremetió contra una de las banderas kirchneristas: "Esto es nada más y nada menos lo que determinaba el FMI: un ajuste encubierto. Porque cuando el FMI determina las políticas, lo primero que hace es congelar los salarios. ¿Y qué ha hecho este gobierno? Congelar y reducir los salarios porque los aumentos de las paritarias se los come el mínimo no imponible y otra parte la inflación. Tantas veces lo criticaron, tantas veces dijeron que se peleaban con el FMI y ahora usan sus recetas por propias convicciones".
La movilización fue convocada por la CGT de Hugo Moyano, la CTA de Pablo Micheli y la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo. Pero también se sumaron la Federación Agraria, la FUA, el MST, el Partido Obrero y la Corriente Clasista Combativa, entre otras organizaciones sociales y políticas. Incluso hasta hubo apoyo desde la UCR: Ricardo Alfonsín llegó acompañado por los diputados Miguel Giubergia, Juan Pedro Tunessi, Atilio Benedetti, Eduardo Costa y Miguel Bazze, minutos antes de los discursos de cierre, a cargo de Pablo Micheli y Hugo Moyano
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